4 pasos para ayudar a los que sufren de pánico
Cuando su ser querido tiene un ataque de pánico, saber cómo ayudar puede ser complicado. Al responder con comprensión y empatía, puede realizar cambios reales.
Ya sea su amigo, pariente o pareja, es posible que conozca a alguien que ha tenido o tendrá un ataque de pánico. Si se encuentra cerca cuando suceden las cosas, naturalmente querrá hacer todo lo posible para comprenderlas y apoyarlas.
Las investigaciones muestran que al menos el 13% de las personas experimentarán un ataque de pánico en su vida.
Según el Instituto Nacional de Salud Mental, una de cada tres personas en los Estados Unidos sufrirá ansiedad en algún momento de sus vidas. Las estadísticas muestran que las mujeres tienen el doble de probabilidades de sufrir un trastorno de pánico que los hombres.
Si su ser querido tiene un ataque de pánico, puede ayudar de muchas formas. Con algunas tecnologías respaldadas por la investigación, será más capaz de brindar apoyo.
1. Nombrar
Diga su nombre con suavidad y dígale a su ser querido que cree que está sufriendo un ataque de pánico. Esto puede proporcionar información básica sobre lo que está sucediendo y aliviar el miedo a lo desconocido.
Puede hacerles saber que pasará. Según la Asociación Estadounidense de Ansiedad y Depresión (ADAA), un ataque de pánico puede durar de 5 a 30 minutos, pero los síntomas más graves generalmente desaparecen en 10 minutos.
Si es la primera vez que su ser querido tiene un ataque de pánico, se recomienda buscar atención médica para descartar otras causas de sus síntomas.
Los síntomas de un ataque de pánico pueden incluir:
- Una punzada de miedo
- Sintiendo que la perdición se acerca
- Miedo repentino a la muerte
- Sentirse fuera de control
- Transpiración
- sacudir
- Palpitos del corazon
- Respiración dificultosa
- Dolor en el pecho
Todos experimentan una ansiedad diferente. Es importante recordar que lo que funciona para una persona puede no funcionar para otras. No tenga miedo de probar diferentes estrategias.
2. Mantén la calma
Una de las mejores formas de ayudar a los demás es mantener la calma, incluso si se siente un poco incómodo por lo que está sucediendo.
Respire hondo y recuerde que esto es temporal, y manténgase calmado. Si la situación lo abruma, pida ayuda a otras personas.
3. Dales espacio
Durante un ataque de pánico, es posible que su ser querido necesite algo de espacio. El estado de hiperdespertar del pánico, cuando su sistema límbico está «muy alerta», puede significar que los elementos comunes en el entorno se sienten sobreestimulados, como el tacto, la música, las luces brillantes u otros sonidos.
Después de recordarle que puede manejar sus síntomas, puede darle espacio a su ser querido hasta que su ataque de pánico haya pasado. Es posible que le pidan que se quede. Si lo hacen, mejore su capacidad para experimentar los síntomas de forma independiente al decir una o dos declaraciones de afrontamiento, lo que les permitirá deshacerse de los síntomas hasta que desaparezcan.
Si ustedes dos tienen un plan, sería útil sugerir que experimenten con ellos después de que termine el ataque de pánico, para ayudar a sus amigos a ver que pueden pasar el día incluso si tienen un ataque de pánico.
4. Proporcione una declaración de respuesta
Queremos empatía cuando alguien tiene un ataque de pánico, pero no queremos reforzar la idea de que el pánico es peligroso, dañino o debe reducirse, minimizarse o evitarse.
Por lo tanto, en lugar de brindarles mucho consuelo a sus seres queridos y molestarlos, recuérdeles que pueden lidiar con lo que sucede por sí mismos. Esto les devolvió la capacidad para hacer frente a esta situación.
Puede hacer esto proporcionando una declaración de respaldo, como:
- «Puedes lidiar con estos síntomas».
- «Esto pasará.»
- «Se siente incómodo, pero puedes aceptarlo».
- «Rodará sobre ti como una ola».
Recuérdeles que aunque los ataques de pánico nunca terminan, generalmente alcanzan su punto máximo en unos 10 minutos. El cuerpo no puede quedarse más tiempo.
Cómo ayudar por SMS
Si recibe un mensaje de texto de alguien cuando está fuera, diciendo «Creo que tengo un ataque de pánico», ¿qué haría?
Una de las mejores cosas que puede hacer es proporcionar frases de apoyo para mejorar su capacidad de afrontamiento. Pruebe algunas de estas frases complementarias:
- «Hay un límite de tiempo. Pasará».
- «Lo hiciste muy bien.»
- «Creo que puedes manejar esto».
- «¡Lo superarás!»
Ya sea cara a cara o por mensaje de texto, trate de evitar exagerar sus síntomas. Su función puede ser ayudarlos a eliminar la idea de que un ataque de pánico es peligroso o intolerable y recordarles que pueden manejar la experiencia. Si necesitan más apoyo en el futuro, puede brindarles ayuda para volver a conectarse.
Entender el trastorno de pánico
Aunque los ataques de pánico pueden hacernos sentir que algo anda mal, son solo una falsa alarma: la respuesta del cuerpo a pelear, huir o congelarse falla. El sistema nervioso simpático responde a las amenazas percibidas impulsando procesos físicos como el corazón y la frecuencia respiratoria. Un ataque de pánico es solo un ejemplo de una respuesta de escape o combate fuera de contexto.
Si su ser querido sufre de trastorno de pánico, experimentará ataques de pánico inesperados y recurrentes y evitará comportamientos o situaciones que podrían conducir a ataques de pánico, lo más cariñoso que puede hacer es no dejarse llevar por el pánico Haga grandes cosas durante el ataque para fortalecer el ciclo del pánico.
También es útil evitar fortalecer su comportamiento de escape, lo que puede suceder al acercarse a ellos o brindarles demasiado consuelo. Si hace esto, puede reforzar inadvertidamente la sensación de que algo debe estar mal.
Una buena forma de ayudar a los amigos con trastorno de pánico es apoyarlos después de que establezcan contacto con el terapeuta que les está realizando la terapia de exposición. Puede animarlos a medida que se exponen gradualmente a situaciones cada vez más desafiantes que pueden causar pánico bajo la guía de un terapeuta bien capacitado. En este ambiente controlado, practicarán la resistencia al escape o el comportamiento de seguridad.
Qué no hacer cuando alguien tiene un ataque de pánico
Aunque es tentador ayudar a su ser querido a evitar la sensación de pánico distrayendo sus sensaciones físicas o manteniéndolo alejado de la situación, estos se consideran «comportamientos seguros». Aunque los comportamientos de seguridad pueden ayudar a aliviar la ansiedad actual, en realidad pueden exacerbar el ciclo de pánico que existe en el trastorno de pánico.
Los comportamientos seguros y las distracciones pueden evitar que las personas comprendan que los ataques de pánico, aunque incómodos, no son realmente dañinos ni peligrosos.
Su ser querido puede lidiar con el pánico sin tomar ninguna medida. Es importante hacerle saber que la ansiedad del pánico desaparecerá por sí solo sin dañarlo.
La terapia cognitivo-conductual (TCC), uno de los principales tratamientos para el trastorno de pánico, le enseña estrategias para reducir la ansiedad y evitar los ataques de pánico. La idea no es detenerlos, sino sentarse con ellos hasta que inevitablemente pasen. Generalmente, con el tiempo, a medida que reduce gradualmente su miedo a los ataques de pánico, los ataques de pánico que experimenta también disminuirán.
La forma más efectiva de lidiar con un ataque de pánico es estar seguro, no resistirlo o evitarlo. Si bien evitar un ataque de pánico a corto plazo puede reducir la ansiedad, a largo plazo solo promoverá el ciclo de pánico porque refuerza la creencia de que el pánico es peligroso, dañino o algo que debe evitarse a toda costa.
La idea es que los síntomas solo estén presentes, lo que le ayuda a tratar un ataque de pánico como una experiencia manejable en lugar de una experiencia que debe evitarse.
Trate de no preguntarle a alguien una y otra vez si está bien, porque esto reforzará la idea de que el pánico es peligroso o dañino. Además, evite frases que puedan invalidar su experiencia, como:
- «Todo está en tu mente.»
- «Animar.»
- «No pasó nada.»
- «Estás bien.»
- «Se como te sientes.»
- «¿qué sucede contigo?»
- «¿Porque estas tan enojado?»
- «No hay nada que temer».
No proporcione material. Puede ser tentador darle a su ser querido algo para aliviar el estrés, pero puede empeorar un ataque de pánico. Ciertas variedades de marihuana, como la alfalfa, pueden aumentar la ansiedad y causar paranoia. El alcohol cambia el nivel de serotonina en el cerebro, lo que intensifica la ansiedad.
Si su ser querido quiere medicamentos para ayudar a tratar futuros ataques de pánico o trastornos de ansiedad, se recomienda que consulte a un médico de atención primaria o un psiquiatra. Los médicos pueden recetar inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) u ocasionalmente usar benzodiazepinas.
Señal de advertencia
Los ataques de pánico suelen desaparecer en unos minutos. De lo contrario, puede significar que está ocurriendo un evento médico más grave, como un ataque cardíaco. Recuerde mantener la calma al evaluar la situación.
Busque estas señales de advertencia:
- Dolor en el pecho (sin hormigueo) que aprieta el brazo o el hombro.
- No mejora la dificultad para respirar
- Los síntomas duran 20 minutos.
- La presión en el pecho dura más de 1 a 2 minutos.
- Vómito
Si ve alguno de estos signos de advertencia, llame al 911 de inmediato.
Algunos de los síntomas de un ataque de pánico son similares a los de un ataque cardíaco. Puede leer sobre cómo distinguir un ataque de pánico de un ataque cardíaco aquí.
Cuídate
Apoyar a alguien durante un ataque de pánico puede ser estresante, no solo para ellos, sino también para usted.
Una vez que el ataque de pánico desaparece y su amigo está más relajado, es importante que dedique algo de tiempo al cuidado personal.
Relájate unas horas o el resto del día. Tómate un tiempo para recargarte practicando yoga, tomando un baño caliente, escribiendo un diario o haciendo cualquier otra cosa que te relaje.
Si cuidar a alguien afecta su propia calidad de vida, considere comunicarse con un terapeuta para hablar sobre lo que está pasando. Consulte el «Directorio de búsqueda de terapeutas» de la ADAA para encontrar médicos locales u opciones de tratamiento remoto que puedan ser adecuadas para usted.
Recuerde, solo podemos amar a los demás como nos amamos a nosotros mismos. Tampoco se puede dar de un vaso vacío. Primero, cuide su energía y luego el resto puede fluir hacia sus seres queridos.
Recuerda que el blog psicologíaya.com es una pagina centrada en la recopilación de información sobre la psicología, diferentes trastornos o padecimientos. Es una pagina web 100% informativa, no remplaza en ningún sentido a un profesional. Si necesitas ayuda, por favor acude con el psicólogo o profesional mas cercano a ti. Tu salud mental o la de tu familia es importante, no lo dejes para después.